Este sábado como manda la tradición, primer sábado del año, se ha realizado la romería de la Virgen del Mar hasta la ermita de Torregarcía. Y no ha sido una romería como cualquier otra, tras casi dos años sin que la virgen visitara la ermita, la edición de 2021 se suspendió por el COVID, este año los asistentes han podido disfrutar de la peregrinación de la virgen, la misa tradicional, bailes folclóricos y casetas de comida y bebida.
A pesar de la alta incidencia del virus en la provincia se quería hacer una romería especial, igual para evidenciar la resiliencia, vocablo tan de moda, y demostrar que salimos más fuertes de esta pandemia. La ermita ha sido totalmente reacondicionada, pintura en interior y exterior, destacando la bóveda azul, y puerta y ventanas nuevas. Una ermita vestida de gala para recibir a una virgen que hacía tiempo que no la visitaba.
Como cada año no han faltado los peregrinos a caballo ni los que viajan en barco, haciendo esta romería tan especial por tierra y mar.
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